Alicia Tamariz da a luz a Aletheia, su primer trabajo personal como compositora, pianista y cantante, donde expresa sus necesidades más esenciales: crear y compartirse. El resultado es una música extremadamente sensible y sincera. Un repertorio que se nutre de diversos ingredientes musicales, como la rica tradición de la música brasileña, el virtuosismo del Jazz y la diversidad sonora de la World Music.