María Parra Trío. Fotografía de Cuco Cuervo

Para la pianista María Parra, la música es un constante desafío. Tras muchos años dedicando su tiempo y empeño a perfeccionar su estilo al rebufo de compositores clásicos, se encontró a sí misma cuando decidió que la felicidad pasaba por expresar sus íntimas emociones a través de sus propias composiciones. 

Surgió así “Visión”, su primer disco compuesto por obras suyas, después de haber editado dos antes. Con el piano y su forma de ver la sociedad, con sus soledades y alegrías, sus miedos y esperanzas, María mostró que con sus composiciones se alcanzaba la paz y se vislumbraba la posibilidad de que el mundo pudiera convertirse en un lugar mejor. 

Durante mucho tiempo, mientras mostraba públicamente su faceta más clásica, estudiaba y se recreaba en la intimidad con el jazz, que lo perfeccionó en sus años en el Taller de Músicos de Barcelona. Y en ese reto vital constante que acompaña su trayectoria artística y personal, María Parra ha querido ir más allá: juntar ambos mundos. Y el desafío ahora era trasladar su visión de la música a la improvisación del jazz, ya intuida también en alguno de los pasajes del disco, pero arropada por dos de los más importantes músicos, el contrabajista Miguel Rodrigáñez y el baterista Gonzalo Maestre, con los que forma una de las bases rítmicas más sólidas del panorama jazzístico español. 

FICHA ARTÍSTICA
Intérpretes: María Parra (piano), Miguel Rodrigáñez (contrabajo) y Gonzalo Maestre (batería)